acerca del
trabajo en clase

La experiencia de lo colectivo

“Uno puede sorprenderse de uno mismo en tanto es parte de una experiencia colectiva. Necesitamos a los otros para alojar esa investigación personal. Ese paisaje vincular está armado por la atención de todas esas personas que están ahí, en contacto con la experiencia de lo desconocido sin traducirla.

Cuando estamos en la experiencia, uno tiene la certeza de que no se quiere ir, es gozosa. Quizás esa sea la única certeza con las que contamos mientras estamos en la experiencia.

Esta red de trabajo vincular alberga la experiencia singular. Uno cree que quiere ser exitoso y lo que quiere en verdad es estar unido a otros en una experiencia de trabajo creativo. Eso es lo potente.

Pensamos mejor si estamos unidos a otros en una experiencia. Las respuestas vienen de la acumulación de práctica, no de la intención de traer respuestas productivas.”

Nora Moseinco

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La profundidad del trabajo aparece siguiendo la evolución del tiempo personal de cada alumno que pone de manifiesto las singularidades de expresión. El maestro establece un vínculo de estímulo y acompañamiento respetando el proceso individual. El vacío y la incertidumbre como terrenos fértiles de encuentro con la espontaneidad y la emoción auténtica.

El entrenamiento es el protagonista y el eje del trabajo anual. Para no distraer ni detener el proceso de investigación personal, el cierre de cada ciclo no apunta a realizar una muestra para el público, sino que propone una experiencia de intercambio con otros grupos.